Por Sara Lever
En los últimos años, la misión de OCHO se ha ido transformado de nuestro interés inicial de proporcionar ayuda directa a enfocarnos en reforzar la infraestructura de la salud y educación de Atima. Para ello el apoyo de nuestros amigos en Atima es crucial para estar al dÃa de todos los acontecimientos que tienen lugar durante las otras 51 semanas del año. Este año tuvimos el privilegio de asistir a una presentación de los expertos en educación especial en Atima, los maestros del Centro de Rehabilitación Integral Comunitario o CRIC. Durante nuestra estancia en Atima, varios maestros de CRIC, Sulmy, Ana, Maribel y SofÃa, nos explicaron la estructura del sistema educativo en Honduras, los orÃgenes de CRIC, asà como los retos y las limitaciones que encuentran a la hora de ofrecer actividades educativas y recreativas para la comunidad de niños con discapacidad en Honduras.
Los maestros explicaron que, en el pasado, las personas con necesidades especiales tenÃan acceso limitado a la educación, debido a carreteras sin pavimentar, las distancias largas entre los asentamientos remotos y el pueblo, y a la falta de reconocimiento de sus derechos legales. Sin embargo, cuando el hijo de Sulmy nació con parálisis cerebral y empezó a demostrar limitaciones en sus habilidades fÃsicas y cognitivas, se dio cuenta de que, a pesar de ser diferente de los otros niños, tenÃa potencial. La determinación de Sulmy y de sus amigos — junto con el apoyo de OCHO — han contribuÃdo al desarrollo del CRIC. Los maestros enfatizaron que las evaluaciones fÃsicas, del habla, ocupacionales y médicas que los expertos de OCHO llevan ofreciendo desde hace seis años les ha ayudado a delinear una lÃnea de base con la que atender a los niños con necesidades especiales que acuden a recibir los servicios que se ofrecen en el CRIC. Estas mujeres trabajan noche y dÃa, mantenido apuntes meticulosos de cada estudiante de CRIC, y haciendo más de lo necesario para ayudar a que cada estudiante tenga la habilidad de maximizar sus capacidades y disfrutar de la vida al máximo.
Durante la presentación, los maestros también invitaron a un miembro de la comunidad — un hombre con discapacidad visual que está bien versado en la ley sobre sus derechos legales — y que compartió su experiencia y presentó un resumen detallado de la ley de discapacidad que existe en Honduras. Estas dos presentaciones indicaron que, aunque se han hecho avances en la aplicación de dicha ley, todavÃa hay mucho trabajo por hacer para mejorar la implementación de la ley. Los presentadores mostraron su valor y pasión explicando cómo están trabajando para educar a su comunidad y es obvio que están motivados a continuar su trabajo de ofrecer todas las oportunidades posibles a personas con necesidades especiales. Nuestra conversación concluyó con una ola de entusiasmo por la apertura del nuevo CRIC-OCHO que proporcionará espacio médico, educativo y recreativo para que la comunidad de necesidades especiales pueda seguir prosperando. La presentación de nuestros pioneros en Atima fue un maravilloso recordatorio de los retos que hemos superado y las frustraciones que debemos seguir superando mediante el trabajo en común y asà poder seguir mejorando la vida de familias con necesidades especiales.
