Por Frank Rivera
[Nota del editor: Frank Rivera ha sido voluntario de OCHO desde 2007 cuando comenzó siendo un colaborador y con el tiempo, y gracias a su propio aprendizaje del inglés, se convirtión en tradutor para los miembros de la brigada. Frank es de Atima y este verano comenzó a impartir sus conocimientos de inglés a un grupo entusiasta de niños y jóvenes de su comunidad. Este año OCHO le hizo entrega de varios diccionarios español-inglés para ayudar a Frank con su deseo de convertirse en maestro de idiomas. OCHO siempre apoyará a jóvenes con iniciativa que muestren deseo de contribuir a su comunidad a través de proyectos a largo plazo. ¿Mucha suerte y a seguir adelante con este proyecto!]
Hace poco comencé un proyecto importante de voluntariado con un programa piloto de clases de inglés a un grupo de 15 niños. El objetivo es aprender un nuevo idoma al mismo tiempo que se divierten. La clase es para niños cuyos padres no se pueden permitir el pago de un curso de este tipo.
Gracias a mi experiencia de colaborador con OCHO, he aprendido a amar mucho más la labor social. Siempre he amado el voluntariado y he formado parte de organizaciones locales como Child Fund y otras, brindando tutorías de ingles a jóvenes que estudian en programas alternativos de estudio. Participé en el proyecto “Armando Paz” en Tegucigalpa.
Decidí emprender este proyecto social llamado HAPPY FACES FOR ENGLISH, como una continuación del Summer Camp impartido por el miembro de la brigada OCHO, el profesor Todd. He empezado voluntariamente enseñando una hora semanal de inglés a 15 niños de primaria como un proyecto piloto siguiendo con el modelo que han impartido los miembros de OCHO. Comenzamos enseñando los saludos, los números y los colores. Padres y niños están contentos y motivados con este proyecto que recién empieza. Con la ayuda de Dios confíamos en poder continuar y proveer esta hermosa labor social en nuestra comunidad. Gracias a OCHO por su amistad durante estos 11 años que tengo de pertenecer como voluntario.
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